La adolescencia es un periodo de crecimiento fisico acelerado, influido por importantes funciones hormonales, lo cual puede traer consigo cambios psicologicos que influyen en el comportamiento, y que pueden convertir al adolescente en un dolor de cabeza para los padres. Sin embargo, la adolescencia tambien puede considerarse como una etapa hermosa de cambios, durante la cual los padres de los adolescentes deben tomar y mostrar una actitud de gratitud a Dios por permitirles tener a sus hijos bajo su techo y bajo su cuidado. La pubertad es una fase de marcados cambios de personalidad en el adolescente, durante la cual, los padres tienen la responsabilidad de involucrarse, al igual que en cualquier otra etapa del crecimiento en la vida de sus hijos.
Ambivalencia en la Adolescecia
En el periodo de la adolescencia, el joven experimenta sentimientos confusos, especialmente hacia los padres. Es usual que el adolescente no quiera ser dirigido, supervisado o aun aconsejado. El adolescente lo considera como un control de su vida por lo cual se esfuerza y lucha por tener libertad, y contradictoriamente, con su comportamiento, busca y necesita la atencion de los padres.
Para los padres, el periodo transcicional de la adolescencia puede representar un reto. Por lo tanto se hace necesario que los padres puedan combinar la autoridad y el afecto paternal, produciendo un ambiente seguro de libertad delimitada con normas establecidas, que les permita a los hijos tomar decisiones, teniendo en cuenta que la autoridad no se puede negociar y que las normas no se pueden transgredir.
Comunicación Ausente
Es vital establecer y mantener una buena comunicación con los hijos jovenes adolescentes. En la actualidad, la respuesta mas frecuente del adolescente a la pregunta acerca de cual es el problema que mas enfrenta con sus padres es: “mis padres no me escuchan”.
Los padres deben evitar el sermonear y juzgar a sus hijos adolescentes, lo cual podria limitar la relacion comunicacional, y mas bien dar prioridad a mantener una buena comunicación, escuchando con atencion los unos a los otros, en respeto y amor, de manera que genere confianza y se mantenga una buena relacion familar. El mantener una puerta abierta para conversar temas sensibles y relevates como relaciones interpersonales, sexo, actividades sociales y religiosas entre otros, asegurandose de tener solida informacion basada en principios biblicos. Asi mismo, mantener presente el expresar el amor, bendiciendoles cada dia con un abrazo o con palabras de animo tales como:“ que bien lo estas haciendo”, “quiero lo mejor para ti”, me siento bendecido-da de ser tu padre, tu madre”.
Ser padre es una carrera que no termina. La crianza de los hijos debe verse como un proceso de diferentes etapas o grados de avance en la mision de preparacion y capacitacion de los hijos para desenvolverse exitosamente en la vida, cumpliendo el plan que Dios preparo de antemano para cada persona.
¡Enséñanos a contar bien nuestros días, para que en el corazón acumulemos sabiduría!
Salmo 90:12 (RVC)
Por: Lic. Rosa Marquez y Lic. Laura Gamboa