¡Atrévete a soñar!. Aunque, los sueños pueden ser vistos a veces como locuras o, como algo imposible de lograr, soñar puede ser la chispa que nos impulsa a arriesgarnos y a tomar la decisión de poner ¡Manos a la Obra!.
Sin embargo, recomiendo, que antes de iniciar el nuevo proyecto soñado, en fe, estemos seguros de hacer que Dios, sea partícipe fundamental del mismo. En la Biblia, podemos leer en el capítulo once del libro a los Hebreos, que nos dice: “Ahora bien, tener fe es estar seguro de lo que se espera; es estar convencido de lo que no se ve” (Hebreos 11:1). Cuando tenemos fe, y creemos que nuestros sueños provienen del corazón de Dios, podemos comenzar a caminar con la confianza de que Él nos guiará en todo tiempo con la pasión y la determinación de seguir adelante, aun cuando no sepamos lo que nos pueda esperar en el camino.
En fe, anímate, y preséntale tu proyecto a Dios; Él conoce nuestro presente y nuestro futuro y como buen Padre, se ocupará de todo, hasta de los detalles más pequeños, para darle color y forma a tu proyecto. Él te revelará Su obra conforme a Su voluntad y Su amor, así como lo hizo con el Rey David, según cita el primer libro de las Crónicas: “Todo esto, dijo David, ha sido escrito por revelación del Señor, para darme a conocer el diseño de las obras”. (1era de Crónicas 28:19). En éste pasaje vemos, claramente, como Dios no solamente habla, sino que también diseña proyectos.
Es tiempo de dejar a un lado los temores, miedos y paradigmas. Bien es cierto que al momento de desarrollar nuestros sueños y proyectos, probablemente, enfrentemos tropiezos, obstáculos y adversidades; pero, aun, en medio de lo que podamos hallar, debemos tener en cuenta que todas las cosas nos ayudarán para bien, conforme al propósito de Dios para nuestras vidas. (Romanos 8:28).
De cada situación difícil que se nos pueda presentar, debemos aprender, ya que, en medio de la prueba, siempre encontraremos un aprendizaje donde nuestro carácter será procesado, y como resultado, seremos perfeccionados y transformados en una joya preciosa que será de bendición para nuestra vida, nuestra familia y para nuestro prójimo.
¡Ánimo! Sueña y ¡Manos a la Obra! Espera el sueño con el plan de diseño de Dios para tu proyecto, y todo lo que emprendas, conforme a Su voluntad, será de éxito, victoria y bendición.
“Nosotros somos hechura suya; hemos sido creados en Cristo Jesús para realizar buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que vivamos de acuerdo con ellas”.
Efesios 2:10 (RVC)
Por: Lladiris Badillo